El día viernes 6 de diciembre me dirigí a Madrid para ver y recoger un vehículo que había visto por Coches.net el día miércoles 4 de diciembre. Según la publicación, el coche funciona perfectamente, sin averías, ITV recién pasada, distribución cambiada, embrague cambiado, 4 discos y pastillas nuevas. También indican que los 4 neumáticos están nuevos, entre otras cosas. Al ver que a simple vista todo estaba bien y con mantenimientos realizados, separé el coche con 100 euros, enviados a la cuenta indicada por el vendedor, preguntándole nuevamente por teléfono si todo estaba en regla. Me indicó que sí, y que todo estaba con facturas y que me las dejaría en el coche.
El día viernes, al llegar a la ubicación enviada por el vendedor, inspeccioné el coche visualmente, que a simple vista no se ve mal. Confiando en la palabra del vendedor, ya que no soy experto en coches, firmamos el contrato y realicé un pago en efectivo de 1700 euros, totalizando 1800 euros, además de una transferencia de 145 euros para gestoría y cambio de titularidad. Poco después de salir, el coche empezó a ir mal: vibra mucho, las ruedas parecen a punto de salirse, los elevalunas y la radio no funcionan. Contacté con el vendedor, pero no respondió. Tras unos minutos de trayecto, apareció una advertencia de avería del sistema de control del motor, seguido de otros fallos como agua en el filtro de gasoil y nivel de aceite bajo. El coche también presenta problemas de estabilidad en la dirección y varias paradas en el camino. Intenté comunicarme con el vendedor, sin éxito, hasta que el día 9 de diciembre se comunicó conmigo solicitando documentación para el traspaso, aunque luego indicó que no tenía las facturas ni el libro de mantenimiento, y que debía esperar o dar de baja el coche por exportación.
El 9 de diciembre, un taller me informó que el coche parece haber sufrido un fuerte golpe en la parte frontal izquierda, afectando varias partes y poniendo en riesgo la transmisión. También detectaron que los neumáticos no son nuevos, son del 2017 y 2020, y que hay pérdidas de aceite, suspensión en mal estado, y que la ITV no es reciente, sino de marzo. Además, hay fallos en el motor y otros problemas como elevalunas rotos, botones dañados, caja de cambios defectuosa y posibles cortocircuitos en la radio. En resumen, el coche presenta múltiples problemas que disminuyen mucho su valor y funcionalidad.
También investigué y descubrí que este mismo coche fue publicado un mes atrás por 1500 euros, un valor menor al actual, lo que indica que el estado del vehículo ha empeorado y que probablemente solo querían venderlo rápidamente. Esto refuerza la sospecha de que el coche tiene vicios ocultos y problemas graves que no fueron informados inicialmente.